“Estimado cliente, como es de su conocimiento, a partir del 1° de mayo del año en curso, Entel SA ha sido intervenida por la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sittel). Esta intervención no afectará de ninguna forma la continuidad y calidad de todos los servicios que usted tiene contratados”. Este fragmento es parte de una carta enviada por Joel Flores Carpio, interventor de la ex capitalizada a los usuarios de la empresa.
A través de este mensaje, fechado el 6 de mayo del 2008, se ha intentado asegurar a los clientes de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) que la eficiencia y calidad de la compañía no están en juego. Ha transcurrido un mes desde que el Gobierno emitiera el Decreto 29544 para recuperar las acciones de Entel y aún hay incertidumbre entre los usuarios.
Y es que muchos aún recuerdan cómo eran el servicio y la cobertura de la “nacionalizada” antes de 1995, cuando fue capitalizada.
Si bien el proceso para la compra de las acciones de Euro Telecom Italia (ETI) aún no se ha resuelto, el Gobierno tiene claro que Entel debe seguir siendo una compañía competitiva y que, para ello, se debe tener en cuenta el dinamismo del mercado de telecomunicaciones. Así lo explica el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Óscar Coca.
La autoridad señala que, al ser el Estado el accionista mayoritario, se transitará de una Sociedad Anónima (SA) a una Sociedad Anónima Mixta (SAM), en virtud de los otros 1.200 socios privados bolivianos que tiene la compañía.
Agrega que lo primero será mantener la efectividad y eficiencia administrativa de la compañía. Por lo que no se contempla incrementar el número de trabajadores.
En cuanto a la imagen corporativa, Coca indica que tampoco está previsto un cambio inmediato y, de hacerlo, “va a ser por razones estrictamente de mercado y de competencia”. “Toda imagen tiene un ciclo y cuando se considere que ese período ha llegado a su final, la empresa creará una nueva imagen, pero no porque sea un mandato del Gobierno”.
El ministro ratifica que se invertirá más en Entel para ejecutar los planes de expansión y la introducción de los nuevos servicios previstos por la anterior administración, dentro de los plazos establecidos; aunque, agrega, se quiere dar un paso más. Así, la primera meta trazada por el Ejecutivo es garantizar que todos los municipios tengan acceso a la telefonía.
Óscar Coca precisa que, además de ampliar la cobertura de los servicios en el área rural, también se trabajará con las zonas periurbanas donde, por ejemplo, no llega la internet. “Hemos recibido reclamos de que, por ejemplo, en la zona de la Autopista no tienen internet. Estamos hablando de un lugar que está a no más de un kilómetro y medio del centro de la ciudad y no tienen este servicio. Esto es incomprensible”.
La expansión no se concibe sin nuevas tecnologías. Por ello, el ministro dice que existe el reto de introducir nuevas tecnologías y una fuerte acción de marketing para reposicionar a Entel. “Antes de fin de año, tiene que haber nuevos elementos tecnológicos que nos permitan disputar el mercado con las otras empresas que están siendo muy ágiles y que están realizando inversiones”, afirma Coca.
¿De dónde saldrán los recursos para aplicar estos planes? El Decreto 29544 establece que los dividendos que generen las acciones “nacionalizadas” serán reinvertidos en el desarrollo tecnológico y crecimiento de la empresa. Es decir que el Estado no destinará recursos del Tesoro General de la Nación (TGN) para la compañía.
En cuanto a los puestos de trabajo, el ministro Coca ratifica que habrá estabilidad laboral, salvo en el caso de los cargos estratégicos.
La autoridad sostiene que, actualmente, algunas funciones de Entel están terciarizadas hacia otras empresas, por ejemplo, el mantenimiento de líneas y de fibra óptica y las conexiones.
A través de este mensaje, fechado el 6 de mayo del 2008, se ha intentado asegurar a los clientes de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) que la eficiencia y calidad de la compañía no están en juego. Ha transcurrido un mes desde que el Gobierno emitiera el Decreto 29544 para recuperar las acciones de Entel y aún hay incertidumbre entre los usuarios.
Y es que muchos aún recuerdan cómo eran el servicio y la cobertura de la “nacionalizada” antes de 1995, cuando fue capitalizada.
Si bien el proceso para la compra de las acciones de Euro Telecom Italia (ETI) aún no se ha resuelto, el Gobierno tiene claro que Entel debe seguir siendo una compañía competitiva y que, para ello, se debe tener en cuenta el dinamismo del mercado de telecomunicaciones. Así lo explica el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Óscar Coca.
La autoridad señala que, al ser el Estado el accionista mayoritario, se transitará de una Sociedad Anónima (SA) a una Sociedad Anónima Mixta (SAM), en virtud de los otros 1.200 socios privados bolivianos que tiene la compañía.
Agrega que lo primero será mantener la efectividad y eficiencia administrativa de la compañía. Por lo que no se contempla incrementar el número de trabajadores.
En cuanto a la imagen corporativa, Coca indica que tampoco está previsto un cambio inmediato y, de hacerlo, “va a ser por razones estrictamente de mercado y de competencia”. “Toda imagen tiene un ciclo y cuando se considere que ese período ha llegado a su final, la empresa creará una nueva imagen, pero no porque sea un mandato del Gobierno”.
El ministro ratifica que se invertirá más en Entel para ejecutar los planes de expansión y la introducción de los nuevos servicios previstos por la anterior administración, dentro de los plazos establecidos; aunque, agrega, se quiere dar un paso más. Así, la primera meta trazada por el Ejecutivo es garantizar que todos los municipios tengan acceso a la telefonía.
Óscar Coca precisa que, además de ampliar la cobertura de los servicios en el área rural, también se trabajará con las zonas periurbanas donde, por ejemplo, no llega la internet. “Hemos recibido reclamos de que, por ejemplo, en la zona de la Autopista no tienen internet. Estamos hablando de un lugar que está a no más de un kilómetro y medio del centro de la ciudad y no tienen este servicio. Esto es incomprensible”.
La expansión no se concibe sin nuevas tecnologías. Por ello, el ministro dice que existe el reto de introducir nuevas tecnologías y una fuerte acción de marketing para reposicionar a Entel. “Antes de fin de año, tiene que haber nuevos elementos tecnológicos que nos permitan disputar el mercado con las otras empresas que están siendo muy ágiles y que están realizando inversiones”, afirma Coca.
¿De dónde saldrán los recursos para aplicar estos planes? El Decreto 29544 establece que los dividendos que generen las acciones “nacionalizadas” serán reinvertidos en el desarrollo tecnológico y crecimiento de la empresa. Es decir que el Estado no destinará recursos del Tesoro General de la Nación (TGN) para la compañía.
En cuanto a los puestos de trabajo, el ministro Coca ratifica que habrá estabilidad laboral, salvo en el caso de los cargos estratégicos.
La autoridad sostiene que, actualmente, algunas funciones de Entel están terciarizadas hacia otras empresas, por ejemplo, el mantenimiento de líneas y de fibra óptica y las conexiones.
Esta situación se mantendrá a corto plazo. “Más adelante, está en análisis la posibilidad de esta recomposición. Veremos lo que le dará eficiencia a la empresa”.
Más allá de los planes del Ejecutivo, ¿cuál ha sido el desempeño de Entel desde el 1 de mayo? Durante el mes de intervención, la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sittel) no recibió reportes sobre grandes problemas en la continuidad de los servicios.
“Las interrupciones que se podrían haber presentado han sido muy cortas y son consecuencia de algunos inconvenientes naturales que se van presentando”, afirma Jorge Nava, superintendente de Telecomunicaciones.
Con todo, al Gobierno le queda un mes para resolver la compra-venta de las acciones.
El Decreto 29544
Pasivos • Según el decreto de nacionalización de Entel, las deudas de esta empresa serán deducidas cuando se efectúe la liquidación final a la empresa ETI, “toda vez que el Tesoro General de la Nación (TGN) asumió todos los pasivos de la empresa pública Entel antes de la capitalización”.
Dividendos • Mientras los recursos que generen las acciones “nacionalizadas” serán reinvertidos en la empresa, aquellos que corresponden al paquete recuperado el 2007 de la administración de las AFP serán destinados al Fondo de Renta Dignidad.
La Ley de Telecomunicaciones debe actualizarse
Tras 13 años de vigencia, la Ley de Telecomunicaciones requiere ser actualizada. Aunque por distintas razones, en ello han coincidido Jorge Nava, superintendente del sector, y Fernando Dips, presidente del Consejo de Administración de la Cooperativa de Telecomunicaciones de La Paz (Cotel).
La Ley de Telecomunicaciones fue promulgada en 1995. Desde el punto de vista de Nava, los cambios que se producen en el sector de telecomunicaciones son más acelerados que en otros rubros. Añade que, así como los operadores deben adaptarse a las transformaciones para brindar un mejor servicio, la normativa también debe adecuarse. “Estaría mal que la norma quede obsoleta, tendría que actualizarse”, asegura.
La meta final de una nueva ley —dice— sería tener a las telecomunicaciones como un derecho de los ciudadanos y como un elemento de modernidad de país.
Para Fernando Dips, un cambio a la Ley de Telecomunicaciones es la única forma en que se garantizará que las cooperativas puedan adecuarse de mejor forma a la realidad tecnológica. “La ley daba todas las ventajas a las capitalizadas. Entonces, ha limitado, por ejemplo, en la concesión de licencias para telefonía móvil. Si esta norma persiste, va a ser un tabú para las cooperativas el desarrollar esta tecnología que es base del desarrollo tecnológico”, sostiene.
Entrevista
“Tras la denuncia de ETI, hemos entendido que la discusión será jurídica”
ÓSCAR COCA A., ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, explica que la negociación con la empresa italiana está congelada.
El proceso iniciado por Euro Telecom Italia (ETI) ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) podría prolongar el plazo fijado por el Poder Ejecutivo para recuperar las acciones del Estado boliviano en la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel).
Óscar Coca, ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, explica que tras la denuncia, la situación está congelada. No obstante, afirma que se ha entendido que el proceso se deberá resolver jurídicamente y que el Gobierno está preparado para asumir la defensa.
¿Cómo está marchando la negociación del Estado con Euro Telecom Italia (ETI)?
La negociación con la empresa italiana digamos que está relativamente congelada, en razón a que las primeras acciones que han asumido ellos, los accionistas, a través de su representante que es el señor Franco Bertone, ha sido una denuncia en Estados Unidos sobre el tema de las acciones.
El tema sólo ha recibido ese primer nivel de denuncia. Después de aquello, no ha ocurrido nada más. En todo caso, nosotros estamos preparados para defender la posición de los bolivianos en cualquier terreno. Por principio, nosotros velaríamos de que esto (el proceso) sea en Bolivia; pero si la situación lo amerita, estamos preparados para asumir la defensa en cualquier otro escenario. Hasta ahora, no ha ocurrido gran cosa salvo la denuncia, lo que ha provocado el congelamiento de las cuentas.
Después de esto, no ha ocurrido nada más. No hemos tenido ningún contacto, a pesar de que en un principio había la predisposición (de negociar). Pero después de la actitud de ellos de proceder a la denuncia y al congelamiento de cuentas, hemos entendido que su lenguaje será el de la discusión jurídica. Muy lamentable, por cierto, porque en principio nosotros habíamos expresado el deseo de que se llegue a algún acuerdo en torno al valor de las acciones; pero ellos han tomado otro camino y obviamente nosotros vamos a defender como Gobierno.
¿De qué forma esto va a impactar en el plazo que se ha dado para recuperar las acciones?
El decreto establece un plazo. Lo que nosotros vamos a hacer es hacer cumplir ese plazo. Ojalá se llegue a algo amigable con ellos hasta ese tiempo. Sin embargo, por las primeras señales, esto va a entrar a un debate jurídico profundo, lo que obviamente nos va a llevar a que el plazo que hemos fijado se prolongue, pero no por decisión y voluntad nuestra, sino por el camino que ellos están tomando.
Y nosotros, jurídicamente, también tendremos que asumir la defensa. Esto es natural, puesto que un tema de litigio no solamente depende de la voluntad de una parte, sino de ambas partes.
Si de parte de ellos, como en un principio habíamos visto que el camino que se estaba tomando era el de negociar, entonces este proceso se iba a acelerar. Si es que se toma el camino tortuoso del proceso jurídico, entonces no sabemos cuánto más puede demorar, pero lo vamos a tener que asumir.
Mientras tanto, ¿va a seguir intervenida la empresa?
Si es que en el plazo establecido no se toman decisiones certeras, en su momento se verá si es o no es pertinente que continúe la intervención o si se procede a un nivel de institucionalización con la nueva composición accionaria.
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