En 10 años de trabajo e inversión, Microsoft Bolivia impactó en más de 750.000 bolivianos con tecnología de última generación, a través de la puesta en marcha de proyectos sociales enmarcados en su política de responsabilidad social.
“Desde que llegamos, se fijó como desafío fortalecer el desarrollo de la industria tecnológica, brindar apoyo y soluciones en beneficio de empresas y, en especial, ayudar a diferentes comunidades del país a formar parte de la sociedad de la información”, aseveró el gerente general de Microsoft Bolivia, Milton Díaz.
En ese marco, apoyaron el desarrollo de proyectos como la construcción de la primera Aula Virtual del país en Aldeas Infantiles SOS de Santa Cruz. Se beneficiaron 60.000 niños en el transcurso de cinco años en los que ingresaron y trabajaron en ella, indicó Díaz.
Su siguiente meta es incluir a los niños y niñas de escuelas fiscales en el uso de herramientas tecnológicas. Acción que dependerá de una potencial alianza con el Estado.
“Estamos seguros de que el uso eficiente de la tecnología generará acciones de promoción y asistencias orientadas a mejorar la calidad de vida, gracias al acceso de información”, sostuvo.
La modernización de las escuelas fiscales y una inclusión de los niños de la calle en proyectos educativos están en sus planes.
Una primera iniciativa la dieron con una donación de 35.000 dólares para el mejoramiento de la infraestructura del hogar de la Fundación de Niños Alalay y la adquisición de software.
El proyecto comunitario juvenil COIJ logró beneficiarse con un centro de internet para el desarrollo de habilidades, generación de investigación y apoyo educacional intermedio como académico. Esta iniciativa se halla en la ciudad de Santa Cruz.
Microsoft Bolivia, desde este año, cuenta con una oficina propia en Bolivia, que demuestra el crecimiento de la empresa en el país y las capacidades del equipo de profesionales bolivianos.
Llegar a más de un millón de bolivianos es el desafío de la nueva gestión que lidera Díaz.
La capacitación es un pilar
El programa de Docentes Innovadores incluyó 80 horas en aula y 80 por ciento de participación, en horarios flexibles.
“El impacto de capacitar llegó a 1.500 profesores y, a través de ellos, a más de 12.000 niños. Esperamos el 2010 emprender una capacitación masiva de docentes, no sólo en La Paz”, aseguró Krshusenka Reyes.
También tienen planificado capacitar a los profesores en las normales. “La idea es transmitir los conocimientos, especialmente llegar al área rural para que ellos puedan traspasar el conocimiento. Necesitan apoyo e integrarse. Cuando estén conectados el impacto será mayor para el desarrollo del país”, enfatizó Reyes.
Coincidió la profesora Ana Escóbar, que lleva varios años en la docencia, en “seguir implementando otros temas para facilitar la enseñanza de los niños. Es nuestro reto que aprendan a mejorar el uso de sus conocimientos. Darles algo nuevo y que no sea repetitivo”.
“Que puedan desenvolverse con mayor confianza es nuestro aporte”, agregó Gilda Montes.
“Desde que llegamos, se fijó como desafío fortalecer el desarrollo de la industria tecnológica, brindar apoyo y soluciones en beneficio de empresas y, en especial, ayudar a diferentes comunidades del país a formar parte de la sociedad de la información”, aseveró el gerente general de Microsoft Bolivia, Milton Díaz.
En ese marco, apoyaron el desarrollo de proyectos como la construcción de la primera Aula Virtual del país en Aldeas Infantiles SOS de Santa Cruz. Se beneficiaron 60.000 niños en el transcurso de cinco años en los que ingresaron y trabajaron en ella, indicó Díaz.
Su siguiente meta es incluir a los niños y niñas de escuelas fiscales en el uso de herramientas tecnológicas. Acción que dependerá de una potencial alianza con el Estado.
“Estamos seguros de que el uso eficiente de la tecnología generará acciones de promoción y asistencias orientadas a mejorar la calidad de vida, gracias al acceso de información”, sostuvo.
La modernización de las escuelas fiscales y una inclusión de los niños de la calle en proyectos educativos están en sus planes.
Una primera iniciativa la dieron con una donación de 35.000 dólares para el mejoramiento de la infraestructura del hogar de la Fundación de Niños Alalay y la adquisición de software.
El proyecto comunitario juvenil COIJ logró beneficiarse con un centro de internet para el desarrollo de habilidades, generación de investigación y apoyo educacional intermedio como académico. Esta iniciativa se halla en la ciudad de Santa Cruz.
Microsoft Bolivia, desde este año, cuenta con una oficina propia en Bolivia, que demuestra el crecimiento de la empresa en el país y las capacidades del equipo de profesionales bolivianos.
Llegar a más de un millón de bolivianos es el desafío de la nueva gestión que lidera Díaz.
La capacitación es un pilar
El programa de Docentes Innovadores incluyó 80 horas en aula y 80 por ciento de participación, en horarios flexibles.
“El impacto de capacitar llegó a 1.500 profesores y, a través de ellos, a más de 12.000 niños. Esperamos el 2010 emprender una capacitación masiva de docentes, no sólo en La Paz”, aseguró Krshusenka Reyes.
También tienen planificado capacitar a los profesores en las normales. “La idea es transmitir los conocimientos, especialmente llegar al área rural para que ellos puedan traspasar el conocimiento. Necesitan apoyo e integrarse. Cuando estén conectados el impacto será mayor para el desarrollo del país”, enfatizó Reyes.
Coincidió la profesora Ana Escóbar, que lleva varios años en la docencia, en “seguir implementando otros temas para facilitar la enseñanza de los niños. Es nuestro reto que aprendan a mejorar el uso de sus conocimientos. Darles algo nuevo y que no sea repetitivo”.
“Que puedan desenvolverse con mayor confianza es nuestro aporte”, agregó Gilda Montes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario