La Intervención de la Cooperativa de Teléfonos La Paz (Cotel) decidió desconocer el derecho a ser socios de la telefónica de quienes hubiesen adquirido una Línea Gemela debido a que el estatuto vigente sólo reconoce como accionistas a quienes compraron la acción en 1.500 dólares.
El interventor de Cotel, César Böhrt, reveló que esta línea no tiene ningún valor comercial y tampoco otorga derechos sobre el patrimonio de la cooperativa a quienes la poseen en la actualidad.
Este beneficio fue otorgado por Cotel en 2004, durante la gestión de Pierre Chain, para contrarrestar la pérdida de valor de la acción de la operadora.
Böhrt aseguró que el estatuto vigente sólo reconoce como socios a quienes en su momento adquirieron un certificado de aportación (acción) en 1.500 dólares.
“El estatuto no menciona Línea Gemela, su distribución fue una política comercial que tuvo fines electorales y fue impulsada por la ex consejera María Eugenia Montaño”.
Sin embargo, dijo que la entrega de la Línea Gemela se volvió “una gran estafa porque en su momento se comercializó a más de 30.000 personas”. Pero después los titulares la vendieron a terceros.
Según el Consejo de Administración y Vigilancia, fue en la gestión de Pierre Chain (2003-2004) cuando se autorizó la venta, con el argumento de que los socios mejorarían el valor de su acción y se llegó a ofertar en 700 dólares.
Esta situación fue observada por algunos de los miembros porque contradecía el Estatuto, pero se siguió adelante.
Según Böhrt, posteriormente los ex consejeros, “antes de abandonar la Cooperativa, determinaron la prohibición de su venta”. “El problema viene desde la gestión Chain y Dips (2003 y 2004), se hizo una resolución administrativa que posibilitaba la comercialización con la creación de un nuevo código”.
Los más perjudicados, dijo, son quienes se compraron las líneas de los titulares al amparo de un aval de quienes autorizaron la operación.
Para la Intervención, estas personas no tienen derecho a reclamar la propiedad de una acción porque sólo son usuarios del servicio de telefonía básica. Por ejemplo, si no pagan la factura por el consumo y si dejan de usar el servicio, el número habilitado puede ser revertido por Cotel.
Böhrt informó que está en marcha una auditoría para determinar las responsabilidades del caso porque la venta fue avalada al margen del estatuto.
La Prensa intentó comunicarse con el ex presidente del Consejo de Administración Fernando Dips, pero no contestó su teléfono celular.
El abogado Eduardo Arce, quien hace algunos años asesoró a Cotel, explicó que si existe una resolución que permitió que la Línea Gemela fuese transferida, la Intervención no puede desconocerla, a no ser que se la hubiese anulado antes.
Agregó que, si el Consejo de Administración en su momento emitió alguna resolución al respecto, quienes accedieron al beneficio pueden reclamar derechos.
La Intervención fundamentó su posición en el hecho de que la Línea Gemela sólo era un “plus” otorgado para mejorar el valor de la acción del socio.
Sin embargo, la cotización de mercado de la acción telefónica está en la actualidad debajo de los mil dólares.
De acuerdo con el diagnóstico de la Intervención, en 2008 el déficit de ingresos de Cotel llegó a 711,6 millones de bolivianos, y al 30 de junio de la gestión pasada a 747.478.176 bolivianos.
De esta manera el 58 por ciento del patrimonio de Cotel (que asciende a 1.280.393 de bolivianos) ingresó en la franja de peligro, pues corría el riesgo de perderse debido a la mala gestión de sus ex autoridades. La cooperativa fue intervenida por 90 días el 17 de junio de 2009, pero el mandato de Böhrt se extendió 90 días más.
La intervención de Cotel debe finalizar el 31 de enero de este año.
Nueva denuncia contra Dips
La Intervención de la Cooperativa de Teléfonos La Paz (Cotel) denunció ayer una nueva estafa presuntamente cometida por el ex presidente del Consejo de Administración Fernando Dips al no incorporar la propiedad de la red de televisión por cable de Caranavi al patrimonio de la telefónica.
Según el interventor César Böhrt, en febrero de 2007, cuando el ex ejecutivo negoció la compra de Supercanal, la red local figuraba en el inventario de bienes ofertados.
Los dueños de la operadora privada de Tv cable vendieron a Cotel el paquete de toda su red de La Paz y El Alto, donde la red provincial tenía la calidad de cesión gratuita por un valor de 80.000 dólares. Böhrt indicó que, sin embargo, una comisión de la Intervención que se trasladó la semana pasada a la localidad yungueña encontró que la red Caranavi había sido vendida mucho antes de la transacción entre Supercanal y Cotel.
Como antecedente se tiene que Dips y los ejecutivos de la operadora, entre ellos Ricardo Bocardo, firmaron un acta de conformidad sobre todos los bienes transferidos.
La Prensa intentó comunicarse con Dips para conocer su versión, pero no contestó su teléfono celular. Böhrt anunció acciones legales por esta nueva irregularidad.
El interventor de Cotel, César Böhrt, reveló que esta línea no tiene ningún valor comercial y tampoco otorga derechos sobre el patrimonio de la cooperativa a quienes la poseen en la actualidad.
Este beneficio fue otorgado por Cotel en 2004, durante la gestión de Pierre Chain, para contrarrestar la pérdida de valor de la acción de la operadora.
Böhrt aseguró que el estatuto vigente sólo reconoce como socios a quienes en su momento adquirieron un certificado de aportación (acción) en 1.500 dólares.
“El estatuto no menciona Línea Gemela, su distribución fue una política comercial que tuvo fines electorales y fue impulsada por la ex consejera María Eugenia Montaño”.
Sin embargo, dijo que la entrega de la Línea Gemela se volvió “una gran estafa porque en su momento se comercializó a más de 30.000 personas”. Pero después los titulares la vendieron a terceros.
Según el Consejo de Administración y Vigilancia, fue en la gestión de Pierre Chain (2003-2004) cuando se autorizó la venta, con el argumento de que los socios mejorarían el valor de su acción y se llegó a ofertar en 700 dólares.
Esta situación fue observada por algunos de los miembros porque contradecía el Estatuto, pero se siguió adelante.
Según Böhrt, posteriormente los ex consejeros, “antes de abandonar la Cooperativa, determinaron la prohibición de su venta”. “El problema viene desde la gestión Chain y Dips (2003 y 2004), se hizo una resolución administrativa que posibilitaba la comercialización con la creación de un nuevo código”.
Los más perjudicados, dijo, son quienes se compraron las líneas de los titulares al amparo de un aval de quienes autorizaron la operación.
Para la Intervención, estas personas no tienen derecho a reclamar la propiedad de una acción porque sólo son usuarios del servicio de telefonía básica. Por ejemplo, si no pagan la factura por el consumo y si dejan de usar el servicio, el número habilitado puede ser revertido por Cotel.
Böhrt informó que está en marcha una auditoría para determinar las responsabilidades del caso porque la venta fue avalada al margen del estatuto.
La Prensa intentó comunicarse con el ex presidente del Consejo de Administración Fernando Dips, pero no contestó su teléfono celular.
El abogado Eduardo Arce, quien hace algunos años asesoró a Cotel, explicó que si existe una resolución que permitió que la Línea Gemela fuese transferida, la Intervención no puede desconocerla, a no ser que se la hubiese anulado antes.
Agregó que, si el Consejo de Administración en su momento emitió alguna resolución al respecto, quienes accedieron al beneficio pueden reclamar derechos.
La Intervención fundamentó su posición en el hecho de que la Línea Gemela sólo era un “plus” otorgado para mejorar el valor de la acción del socio.
Sin embargo, la cotización de mercado de la acción telefónica está en la actualidad debajo de los mil dólares.
De acuerdo con el diagnóstico de la Intervención, en 2008 el déficit de ingresos de Cotel llegó a 711,6 millones de bolivianos, y al 30 de junio de la gestión pasada a 747.478.176 bolivianos.
De esta manera el 58 por ciento del patrimonio de Cotel (que asciende a 1.280.393 de bolivianos) ingresó en la franja de peligro, pues corría el riesgo de perderse debido a la mala gestión de sus ex autoridades. La cooperativa fue intervenida por 90 días el 17 de junio de 2009, pero el mandato de Böhrt se extendió 90 días más.
La intervención de Cotel debe finalizar el 31 de enero de este año.
Nueva denuncia contra Dips
La Intervención de la Cooperativa de Teléfonos La Paz (Cotel) denunció ayer una nueva estafa presuntamente cometida por el ex presidente del Consejo de Administración Fernando Dips al no incorporar la propiedad de la red de televisión por cable de Caranavi al patrimonio de la telefónica.
Según el interventor César Böhrt, en febrero de 2007, cuando el ex ejecutivo negoció la compra de Supercanal, la red local figuraba en el inventario de bienes ofertados.
Los dueños de la operadora privada de Tv cable vendieron a Cotel el paquete de toda su red de La Paz y El Alto, donde la red provincial tenía la calidad de cesión gratuita por un valor de 80.000 dólares. Böhrt indicó que, sin embargo, una comisión de la Intervención que se trasladó la semana pasada a la localidad yungueña encontró que la red Caranavi había sido vendida mucho antes de la transacción entre Supercanal y Cotel.
Como antecedente se tiene que Dips y los ejecutivos de la operadora, entre ellos Ricardo Bocardo, firmaron un acta de conformidad sobre todos los bienes transferidos.
La Prensa intentó comunicarse con Dips para conocer su versión, pero no contestó su teléfono celular. Böhrt anunció acciones legales por esta nueva irregularidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario