Crecimiento: La inestabilidad económica estimula la copia y distribución ilegal de programas informáticos.
Libros, música y películas, pero especialmente software como uno de los productos más explotados por la piratería en todo el mundo; en el caso de Bolivia, el índice de la piratería es del 80 por ciento en programas para el uso de computadoras, de acuerdo con datos obtenidos del último estudio de la International Data Corporation (IDC) y de Business Software Alliance (BSA).
Los países con las mayores cifras de piratería son Venezuela (87 por ciento), Paraguay (82 por ciento) y Bolivia (80 por ciento), informó el portal de radio Fides. Otros, aunque con menos incidencia son Colombia (55 por ciento), Brasil (56 por ciento) y México (60 por ciento).
Sin embargo, en siete años, el porcentaje en Bolivia bajó, puesto que en 2003 se situaba en el 87 por ciento.
En los últimos años, la empresa argentina Software Legal lanzó en Bolivia una campaña de acreditación de software legal, con lo que se logró que 100 empresas respondieran positivamente.
Si se redujera en 10 puntos la piratería de software, en el caso de Bolivia, que está en 80 por ciento, se generaría 1.000 nuevos puestos de trabajo relacionados con la industria de programas.
Por cada dólar de licencia, se generan dos dólares por servicio en beneficio directo de la industria local.
La provisión de software pirata incrementa por el acceso del público a la internet, particularmente al servicio de banda ancha, de donde es fácil obtener una copia de programas informáticos.
El informe señala que el mercado ilegal en regiones menos desarrolladas continuará creciendo como resultado de la copia de programas sin autorización, como efecto de la reducción del crecimiento económico en la región.
Falta un mecanismo de control
La ausencia de un mecanismo de control, el vacío legal y la falta de cooperación del propio Gobierno a la venta de programas de computación con licencia, son los problemas que identificó el gerente administrativo de la empresa Globe Computer System, Luis Paz, cuando comentó sobre el diagnóstico de la International Data Corporation (IDC) y Business Software Alliance (BSA).
Como ejemplo, señaló una reciente licitación estatal para la compra de programas para 25 computadoras, con un valor de 75.000 dólares. Aparentemente, la institución eligió una propuesta de 3.000 dólares para adquirir una licencia que luego pudo haber sido instalada sin licencia en varios equipos.
Por lo tanto, la pérdida para el propietario de la licencia alcanza a unos 72.000 dólares y es un ejemplo de la forma en que se procede con frecuencia, afirmó el ejecutivo. El uso del programa pirata no ha sido sancionado, expresó.
Cineastas pierden 30% de recaudación
El cineasta boliviano Marcos Loayza afirmó que las pérdidas por la venta y distribución de películas piratas generan pérdidas equivalentes a un 30 por ciento de las recaudaciones que se obtiene en las salas cinematográficas.
Los comerciantes agremiados también encuentran en el pago de patentes un respaldo para sus actividades de venta de productos ilegales, comentó Loayza.
La Alcaldía no tiene mayor interés en examinar los productos que comercializan los gremiales y menos les exige facturas, y por ello se puede comercializar películas y muchos otros productos, según el director de la película Cuestión de Fe
Entre otros daños a la obra intelectual y artística de los cineastas, mencionó el cambio de formato, los cortes y alteraciones que sufren las obras originales que son producidas a elevados costos. En Bolivia, las pérdidas por la comercialización de películas piratas alcanza a unos 10 millones de dólares, expresó.
Pérdidas por 40 millones de dólares
La Asociación Argentina de Software Legal estimó en 40 millones de dólares las pérdidas por la instalación de programas informáticos ilegales en Bolivia, y realiza campañas con la finalidad de obtener la adhesión de empresas a la compra de licencias.
La Ley de Derechos de Autor promulgada en Bolivia, en abril de 1992, protege la propiedad intelectual de los “programas de ordenador o computación (soporte lógico o software) bajo reglamentación específica”, según expresa el inciso i) del artículo seis.
En el artículo 65 de esa legislación, se establece que los procesos que den lugar a las infracciones a este cuerpo legal, serán de conocimiento de la Judicatura Penal Ordinaria, de acuerdo con la Ley de Organización Judicial, Código Penal y Código de Procedimiento Penal. El artículo 66 expresa que las sanciones penales por infracciones o violaciones al Derecho de Autor configuradas en esta legislación, serán las establecidas por el Código Penal en su artículo 362.
Para destacar
Tercer país. Bolivia ocupa el tercer lugar, después de Venezuela y Paraguay, en el uso de programas informáticos sin licencia.
Un importador observa la falta de cooperación del propio Gobierno para aplicar la norma de derechos de autor.
Cineastas. Los productores de películlas pierden hasta un 30 por ciento de las recaudaciones por las copias ilegales.
40 millones de dólares representan las pérdidas en Bolivia por el uso ilegal de programas informáticos .
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