Un grupo de socios de la Cooperativa de Teléfonos de La Paz (Cotel), denuncian que no existe capacidad para resolver la crisis financiera por las deudas contraídas con el Estado, y piden que se convoque a una asamblea de socios para definir la suerte de la telefónica.
Asimismo, revelaron que los actuales ejecutivos vulneran el reglamento interno al no admitir las observaciones del Consejo de Vigilancia que en su Resolución C.V. 0005/2012 recomienda la “suspensión de sus funciones del gerente general Ramiro Medrano Móntes, como una medida precautoria y por existir riesgos en la obstrucción o alteración de información”.
Entre los años 2002 y 2003 la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT), impuso una multa a Cotel de 72 millones de bolivianos.
Sobre la Cooperativa, también hay una orden judicial para la anotación preventiva de sus bienes, así como de los vehículos registrados acciones y derechos, además que sus cuentas fueron congeladas.
Consultado sobre este tema el interventor de Cotel Emilio Gutiérrez, explicó que la dirección jurídica de la cooperativa también impulsa acciones judiciales contra exconsejeros para que respondan por el mal manejo en gestiones anteriores.
La actual administración inició procesos penales al expresidente del Consejo de Administración, Jorge Paco Marín y otros ex y actuales directivos por falsedad ideológica y material, entre otros delitos, por un daño económico de al menos nueve millones de dólares.
En un comunicado hecho público, los socios de Cotel Remy Solares y Roger Morales, recuerdan que esa entidad pasa por una profunda crisis por efecto de los malos manejos y la intervención del Gobierno.
“Cotel en la actualidad esta empantanada técnica y económicamente, su situación económica es desastrosa y se encuentra ahogada en deudas a empresas con las que suscribió contratos, así como con la ATT (Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes)”, dijo Solares.
Añadió que la situación económica de la telefónica es “dramática” y que tiene dificultades para cubrir sus costos operativos, así como para cumplir con el pago de los salarios.
Según Solares, el desconocimiento del rol de las telecomunicaciones por parte de los ejecutivos de Cotel, ha dado lugar a decisiones de endeudamiento crítico como consecuencia de ejecución de proyectos sin planificar, sobredimensionados técnica y económicamente, además de no presentar estudios de demanda del servicio.
“Por estas causas los socios de la cooperativa demandamos al Consejo de Vigilancia convocar a una asamblea general que defina el futuro de la entidad y evitar las intervención del Gobierno que ha visto a Cotel como el botín político”, sostuvo.
Solares recordó que deben ser los socios, quienes definan un modelo de tipo empresarial factible que saque a la telefónica de la crisis financiera.
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