El Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) clausuró el jueves -por 12 días- la oficina central de Tigo en Santa Cruz por no dar factura. La empresa telefónica calificó la medida de “desproporcionada”; el hecho afecta a 600 de sus clientes al día.
Según un comunicado de la propia telefónica, ésta reincidió en la comercialización de chips y crédito telefónico sin dar la respectiva factura.
La clausura temporal se produjo luego de que se constatara “el delito de no emisión de facturas” por dos veces consecutivas.
El miércoles 10, en la primera intervención a una de las sucursales de Tigo, se comprobó que no se emitió la factura por la recarga de crédito por un total de diez bolivianos. Horas más tarde, la oficina central de la empresa incurrió en el mismo delito tributario al no extender factura por la venta de un chip y una recarga por 30 bolivianos.
Según las normas tributarias en vigencia, al ser una reincidencia correspondía realizar la clausura por 12 días, señaló la institución recaudadora.
Tigo calificó de “desproporcionada” la clausura de su oficina regional y dijo que uno de sus empleados incumplió las normas, por lo que será sometido a un proceso interno. Además, anticiparon que acudirán al uso de los recursos legales que les asisten para defender sus derechos.
“Entendemos que la administración tributaria está actuando de manera desproporcionada, pues por el error de un funcionario interrumpió el servicio y afectó la atención a un promedio de 600 personas por día”, asevera la telefónica en un comunicado institucional, según ANF.
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