Dos expertos en seguridad de EEUU consiguieron "hackear" el sistema de dos modelos de coche en un proyecto del Pentágono. La curiosidad del experimento, más allá de que lograron un control casi total sobre los vehículos, es que los controlaron con un mando de la clásica consola Nintendo Entertainment System (NES).
Los investigadores realizaron esta demostración sobre las posibilidades de que atacantes tomen el control de un coche sin el permiso de su dueño. Eso sí, para poder manejarlo, conectaron un ordenador portátil al vehículo y le inyectaron un virus.
No hay comentarios:
Publicar un comentario