Libertad mayor movilidad con el inalámbrico

La idea de hablar por teléfono sin moverse, parece haber sido el motivo para que el inventor y sacerdote brasileño Roberto Landell de Moura, se las ingenie para crear hace 113 años el primer prototipo de un teléfono fijo inalámbrico.

Su comercialización, similar a la forma que hoy conocemos, comenzó recién a inicios de la década del 40 del pasado siglo. Hoy, las marcas se las ingenian para captar nuevos adeptos de este equipo que facilita las acciones del quehacer diario en el hogar y en el trabajo.

Hasta hace poco cuando se generaba un corte de electricidad, estos teléfonos se apagaban; ahora existen nuevos modelos que incluyen energía de respaldo, es decir, que el equipo puede seguir funcionando por algunas horas hasta que regrese la energía.

Otras de las ventajas es que la persona puede moverse en un radio de hasta 120 metros cuadrados fuera de la base del teléfono. También cuentan con contestador de llamadas, altavoz e identificadores.

Casa Korea, Casa Jerusalén, Eico Center, Radio Shack y Reifschneider Bolivia son las representantes de estas novedades que le otorgarán libertad