Causas y síntomas. Las causas de la tendinitis se encuentran en los movimientos repetitivos del dedo pulgar, además de las lesiones por sobrecarga de la articulación o ciertas enfermedades sistémicas, como la diabetes o la artritis reumática. Otra posible causa es la edad, ya que conforme pasan los años los tendones pierden elasticidad. Los síntomas que pueden sentir, en especial los adolescentes que se pasan horas en el teléfono, son dolor al mover la articulación en la que se encuentra el tendón afectado, dificultades para mover la articulación e incluso inflamación.
Tratamiento. El objetivo es reducir el dolor y la inflamación, lo que puede conseguirse inmovilizando con férulas o yeso en la articulación afectada. Además de administrar antiinflamatorios o inyecciones, la aplicación de frío y calor también puede aliviar el dolor del tendón.
Reacciones inmediatas. Se recomienda aplicar hielo, porque es más eficaz y se lo puede utilizar en intervalos de 10 a 20 minutos (cada tres o cuatro horas). El masaje de la articulación entre la muñeca y el pulgar también es efectivo para recuperarse de una tendinitis en la zona. El masaje aumenta el flujo sanguíneo, lo que lleva oxígeno y nutrientes a la articulación para la curación. El masaje también ayuda a aumentar la flexibilidad y ayuda a relajar la articulación.
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