Una empresa realiza labores de monitoreo de cultivos y estado de construcción de carreteras a través de imágenes captadas por drones (vehículos voladores no tripulados). Ello es posible con la combinación de la tecnología de estos aparatos, la utilización de GPS, cámaras fotográficas, software especializado y técnicas de mapeo territorial con imágenes de alta resolución.
Este salto de las imágenes satelitales -poco precisas en definición de detalles- hacia imágenes aéreas de superficies determinadas con alta nitidez, lo dio un emprendedor boliviano que consolidó Aeroterra, empresa dedicada al monitoreo aéreo de distintas superficies con diferentes propósitos.
La minería, evaluación de carreteras, topografía, medición de desastres naturales y cartografía urbana, son otras áreas donde se puede aplicar esta técnica. Sin embargo, el fuerte de esta empresa es, según su gerente general, Marco Camacho, el monitoreo en agricultura.
La idea de utilizar esta teconología nació hace tres años, luego de funcionar durante un año con datos satelitales para obtener las imágenes deseadas.
"El nivel de resolución que tiene una fotografía aérea es impresionante. El tiempo y la facilidad de operación es mucho más rápido y conveniente que trabajar con una imagen de satélite”, afirma Camacho.
Comenta que los diferentes trabajos que se les encomienda varían, desde monitorear plantaciones de estevia hasta verificar que el estado de construcción de una carretera esté en el marco de los plazos establecidos entre partes.
Sobre los drones
En la actualidad, Areroterra cuenta con tres drones en forma de avión que fueron adaptados para captar las imágenes con cámaras especializadas.
Cada una de las unidades cuenta con un mando a distancia, un sistema de piloto automático, el Sistema de Posicionamiento Global (GPS) y un software especial de control de las imágenes, a tomarse con un plan de vuelo establecido según las necesidades del cliente.
"Una vez que alcanza la altura que planificamos, 70, 100 o 200 metros, se enciende el piloto automático y sigue el curso del vuelo planificado”, cuenta Camacho.
Según el responsable de geomática de Aeroterra, Jesús Tarquino, la altura que pueden alcanzar estos ejemplares va desde 80 hasta 500 metros.
"La resolución (de las fotografías) oscila de 2 centímetros a bajas alturas, y 50 centímetros a grandes alturas. La capacidad de mapeo en el mejor de los casos, a grandes alturas, es de 50 mil hectáreas”, asevera Tarquino.
Este funcionario acota que la autonomía de vuelo de estos aparatos es de 30 minutos, tiempo que aún no es el ideal, pero que es un factor que depende netamente del desarrollo tecnológico.
Punto de vista
Rafael Cortez
Ingeniero geólogo
Se aprovecha
la tecnología
Es una herramienta más. Que se aproveche la tecnología y las nuevas herramientas está perfecto. Lo que sí hay que tener en cuenta siempre, es que el dron es sólo una herramienta que va a dar información que tiene que pasar, de todas formas, por el conocimiento de los especialistas, y a partir de eso recién generar información.
No es que el dron va a reemplazar a la persona. Es una herramienta que nos permite obtener más información
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