Cómo evitar el seguimiento de empresas en la web

Una de las grandes innovaciones y que ha permitido crear incluso un negocio detrás es la llamada “cookie”, un código informático instalado en la mayoría de las páginas web y cuya misión es recopilar información de los usuarios.

La publicidad segmentada y contextual se basa en el historial de búsquedas de un determinado usuario para ofrecerle artículos e información que los anunciantes piensan que pueden interesarte. Tras este sistema de publicidad se esconde una pregunta importante: ¿quién observa nuestra actividad en internet?
Según los expertos de la firma de seguridad informática Kaspersky Lab, puede ser “alarmante” que muchas empresas sean capaces de “hacer seguimiento”. “Los usuarios se encuentran bajo la mirada de cualquier recurso popular pero nuestros principales vigilantes son las redes de anuncios, sobre todo las principales como Google Adwords, Oracle Bluekai, Atlas Solutions o AppNexus”, consideran.
El propio navegador ya proporciona la dirección IP, información sobre las versiones del software, la resolución de la pantalla que se utiliza… Toda esta información, que a priori puede parecer inocente, “al combinarla supone un buen punto de partida para que el anunciante pueda realizar más acciones”, explican los expertos, al tiempo que manifiestan que: “las cookies son una buena herramienta para recopilar datos, ya que contienen información sobre las páginas por las que se navega: preferencias, secciones más vistas”.
Los expertos consideran que se conoce muy poco sobre el tipo y la cantidad de datos que acumulan los anunciantes. “El seguimiento online no es tan inocente como pueda parecer, aunque no tengamos nada que esconder la pregunta que hay detrás es: ‘¿dónde acaban los datos que las compañías de internet han recopilado de nosotros?’”, advierten.
La firma de seguridad critica que “no existen pruebas de que estos datos sean almacenados de forma segura y las fugas de datos de estas compañías son el pan nuestro de cada día”. Por ello, los expertos recomiendan una serie de consejos que puede ayudar a evitar poner en riesgo información personal.

Cambiar los ajustes
del navegador
De forma mecánica y poniendo en entredicho los cuestionamientos y arquitecturas de la una determinada web, se puede controlar la información que uno comparte. Por ejemplo, el usuario puede desactivar la opción de seguimiento directamente. “De este modo, el navegador notificará a la fuente web que no deseas compartir tus datos. Su eficacia es discutible ya que muchos sitios ignoran la indicación de no realizar seguimiento” aconsejan.

Desactivar la instalación automática
Los expertos lo tienen claro: es conveniente activar el bloqueo de sitios web sospechosos y “pop-ups”, ventanas emergentes que aparecen cuando navegamos por ciertas páginas. “También conviene tener activada la verificación obligatoria del certificado SSL”, dicen.

Bloquear las “cookies”
de terceros
Otra de las recomendaciones es bloquear las “cookies” de terceros que pertenecen a redes de anuncios. “Sin embargo, estas redes, con la ayuda de algunos trucos pueden transferir las cookies de origen, que son necesarias para iniciar sesión”, lamentan.

Usar la navegación privada
Hay navegadores que permiten optar por una funcionalidad muy interesante. Es la opción de utilizar la navegación privada. “Al cerrarlo -dicen los expertos- todos los datos se eliminarán con lo que el seguimiento será más difícil”.

Limpiar caché
Los expertos se muestran tajantes también en otros aspectos. En primer lugar, es conveniente limpiar la caché del ordenador de vez en cuando y, por otro, evitar los paneles de búsqueda, los ayudantes de búsqueda y a cualquier otra extensión que te ofrecen al instalar el navegador, ya que se trata de “spyware” legal.