Los teléfonos públicos constituyen un gasto más que una inversión rentable para la Cooperativa de Telecomunicaciones Sucre (COTES). Los 163 equipos que están instalados en varias zonas de la ciudad se han vuelto en un ornamento más, que recuerda lo que fue este útil sistema con monedas.
Los teléfonos públicos que están instalados en las plazas, parques, establecimientos educativos y hospitales, son parte de la historia de Sucre, sin embargo, con el transcurrir de los años y con el avance de la tecnología han quedado obsoletos.
En Sucre hay 163 teléfonos públicos, muchos de ellos en mal estado o destrozados por algunos mal entretenidos. A decir del gerente técnico de COTES, Ricardo Torres, el uso de este servicio en la ciudad es mínimo, sin embargo se mantienen debido a la función social que debe cumplir la empresa.
Asimismo, el consejero de Administración, Juan Pablo Barrón, advierte que la telefonía pública genera más gastos que ganancias y que por “la obligación” que les impone la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT), estos teléfonos estarán en Sucre por muchos años más.
Barrón reveló que con los teléfonos públicos se recauda Bs 2.000 al mes, una cifra mínima considerando la inversión que realiza COTES al tener los equipos instalados en la ciudad.
Los Consejos de Administración y Vigilancia analizan una nueva propuesta para hacer que la telefonía pública siga siendo social y también genere utilidades.
Los lugares donde más se usa los teléfonos son los hospitales y el penal San Roque.
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