Empieza un período muy intenso en la industria tecnológica marcado por el éxito de varias tendencias TIC y el fracaso de otras pocas. Revisemos las principales perspectivas para este nuevo año n el sector TIC y la innovación digital en general.
REALIDAD VIRTUAL Y AUMENTADA
Este año tres de cada diez grandes compañías van a implementar la realidad virtual o la realidad aumentada en sus campañas o estrategias de marketing; un paso todavía tímido ya que la gran explosión de esta tendencia se vivirá en 2021. El 2016 se vendieron -según las principales firmas de análisis- más de siete millones de gafas de realidad virtual. Para 2020, se estima que haya más de 100 millones de usuarios en todo el mundo. La realidad virtual abre una oportunidad de negocio para muchas startups.
ANÁLISIS DE DATOS
En el mundo el Big Data será procesado en los próximos años, con 2017 marcado en rojo por las empresas como el año en que deben dar los pasos más decididos para abordar esta tendencia. Así pues, la industria tecnológica espera crecimientos sin igual no sólo en el software de análisis de datos (Business Intelligence, Business Analytics, etc.) sino en la propia explotación de los datos (Data Mining), su descubrimiento (Data Discovery), almacenamiento (storage), talento (data scientists) transmisión (comunicaciones). También hay que tener en cuenta el impacto que tendrá el Internet de las Cosas en la producción de nueva información en tiempo real, que podría llevar este procesamiento de información hacia el extremo de la cadena, al propio dispositivo en lugar de al centro de datos, todo eso con la nube y los modelos de Big Data as a Service .
INTELIGENCIA ARTIFICIAL
La inversión en inteligencia artificial alcanzará los 5.000 millones de dólares en 2020 de acuerdo a las previsiones de la consultora Gartner. Aprendizaje profundo, machine learning, chatbots, sistemas cognitivos… son mil y una las definiciones y aplicaciones prácticas de esta tendencia que veremos en 2017 y en años posteriores.
La inteligencia artificial es la gran apuesta de la industria tecnológica para los cursos venideros, con aplicaciones directas no sólo sobre los canales de atención al usuario o las comunicaciones máquina-humano, sino también en terrenos como el análisis inteligente de datos, la predicción de tendencias de consumo o, más inmediatamente, el coche autónomo.
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