Usar la nostalgia para vender no es nuevo, pero en los últimos meses se ha hecho especialmente fuerte esta estrategia entre las compañías para estirar las ventas con productos de todo tipo. Desde dulces hasta moda y ahora en el sector tecnológico.
El ejemplo más claro se vio la semana pasada durante el Mobile World Congress (MWC) cuando el finlandés HMD presentó una nueva versión del Nokia 3310, que aunque conserva el juego de la viborita no tiene acceso a otras aplicaciones básicas hoy día, como WhatsApp.
Eso no importó para atraer los focos y que la reedición del móvil de hace 17 años se haya consagrado como la estrella de la feria de móvil por encima de otros teléfonos de última generación, como el Huawei P10 o el Lg G6.
No fue el único caso. Samsung aderezó la presentación de sus nuevas tabletas con el nuevo dispositivo de Staedtler. La icónica marca de lápices presentó el Noris Digital for Samsung, un bolígrafo interactivo para tabletas, muy parecido a los lápices de hace décadas.
Al margen de las novedades del MWC, durante los últimos meses el sector de la tecnología se ha convertido en una fuente recurrente de guiños hacia hitos del pasado, especialmente en el apartado de videojuegos.
El principal exponente ha sido Nintendo, que decidió que 2016 fuese el año de lanzar por un lado al mercado Pokémon Go, el primer videojuego de la compañía para móviles con motivo del 20 aniversario del lanzamiento del videojuego.
Sin embargo, la oda a la nostalgia definitiva por parte de la compañía japonesa llegó en noviembre, cuando Nintendo lanzó al mercado la NES mini, una pequeña consola que incluía los 30 juegos principales de la consola Nintendo Entertainment System lanzada en el año 1983.
La respuesta del mercado a la salida de la NES mini ha sido espectacular, agotando las unidades antes de salir al mercado y provocando listas de espera para poder hacerse con la consola. Un tiempo de espera que todavía hay que sufrir si uno quiere hacerse con la consola, casi en paralelo al lanzamiento de Nintendo Switch, la consola de nueva generación de la compañía.
Así como Nintendo aprovechó el 20 aniversario de Pokémon para estirar ventas del videojuego, la desarrolladora Activision hizo lo mismo con una de las franquicias más queridas por los jugadores que rondan los 30 años: Crash Bandicoot.
La vuelta del juego de plataformas ha sido muy rumoreada durante los últimos años, pero será finalmente en 2017 cuando el zorro rojo desembarque en consolas.
Finalmente, el gigante Disney anunció en agosto la vuelta de sus juegos clásicos de 16 bits como Aladino, El Rey León y El Libro de la Selva.
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