“La comunidad empresarial boliviana lamenta el fallecimiento de un alto ejecutivo y socio de una empresa de telecomunicación. Según fuentes cercanas, llegó de Nueva York y por malestares dejó de asistir al trabajo”, agregó ese medio.
“Su última comunicación la realizó el sábado con el mensaje optimista de estar el lunes (hoy) en su domicilio. Ejecutivos de la empresa admiten sentirse devastados ante la irreparable pérdida”, agrega.
El caso no ha sido reportado todavía por las autoridades sanitarias bolivianas, pero sus parientes confirmaron las causas del deceso, que se produjo alrededor de las 12 de la noche del domingo 29.
Sandoval llegó de un viaje a Nueva York y empezó a sentirse mal en los siguientes días, por lo que decidió aislarse, contó una persona que lo conoció. El miércoles 25 se hizo una prueba de COVID-19 en un laboratorio privado.
Cuando su situación empeoró, sus familiares decidieron llevarlo a una clínica de la zona Sur de La Paz, pero fue entonces recién que el SEDES actuó e impidió que se internara en ese centro, por lo que fue conducido al Hospital La Portada.
Una persona de la fundación Alalay, con la que Sandoval estaba relacionado, contó que en el hospital de La Portada empezó a sentirse peor, pero que no pudo llegar un intensivista a ese centro médico.
Fue en ese momento que los médicos de La Portada sugirieron que fuera enviado al Hospital del Norte, pero llegó allí sin signos vitales.
Solamente dos personas cercanas a Sandoval podrán velarlo, porque el resto de sus familiares está aislado en su domicilio.
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